Los republicanos del Congreso han presentado la Ley de Protección de la Elegibilidad de los Votantes Estadounidenses (SAVE), un proyecto de ley anti-votante peligroso e innecesario que dificultaría significativamente que los votantes estadounidenses elegibles se registren y emitan su voto, independientemente de su afiliación partidaria.

La Ley SAVE impondría nuevos y engorrosos requisitos de identificación de votantes y obligaría a registrarse en persona, privando efectivamente del derecho al voto a millones de estadounidenses. Esta legislación es un ataque a los derechos de voto, especialmente a las personas de bajos ingresos, las personas de color, las personas afectadas por la justicia, los votantes rurales, los adultos mayores, los estudiantes y las personas con discapacidades, comunidades que ya enfrentan barreras sistémicas para participar en las elecciones.

Por qué esto es importante

Le instamos a que llame a sus representantes y senadores para exigir un voto NO a la Ley SAVE.

La Ley SAVE contradice directamente la voluntad del pueblo. En Michigan, la Propuesta 22-2, que fue aprobada por abrumadora mayoría por los votantes, amplió el acceso a las papeletas de voto por correo, la votación anticipada y el registro en línea. La Ley SAVE revertiría esas mejoras fundamentales y dificultaría el voto de millones de personas.

Cómo la Ley SAVE perjudica a los votantes

1. Acabaría efectivamente con el registro de votantes en línea y por correo

• El proyecto de ley elimina el registro de votantes en línea en los 42 estados que actualmente lo ofrecen, obligando a los funcionarios electorales a depender de sistemas en papel obsoletos, costosos e ineficientes.
• Prohíbe el registro de votantes por correo y exige que todas las solicitudes se presenten en persona con estrictos requisitos de documentación, lo que supone una enorme barrera para muchos votantes.

2. Eliminaría las campañas de registro de votantes de terceros

• Las organizaciones sin fines de lucro y los grupos comunitarios que ayudan a registrar nuevos votantes (especialmente personas afectadas por la justicia, personas sin hogar y aquellas con movilidad limitada) ya no podrían recolectar formularios de registro de votantes.
• Sólo los funcionarios del gobierno podrían revisar y procesar la prueba de ciudadanía, lo que haría imposible que grupos como Voting Access For All Coalition (VAAC) continúen su importante trabajo de registro de votantes.

3. Impone requisitos de prueba de ciudadanía innecesarios y onerosos

• El proyecto de ley requeriría que todos los votantes presenten prueba documental física de ciudadanía, como un pasaporte o certificado de nacimiento (con una identificación con fotografía), cada vez que se registren o actualicen su registro.
• No se aceptarán identificaciones reales, identificaciones militares ni certificados de naturalización sin documentación adicional.
• Más de 21 millones de estadounidenses elegibles no tienen a mano la prueba de ciudadanía requerida.

4. Priva de derechos a las comunidades marginadas

El requisito de prueba de ciudadanía es particularmente perjudicial para:

• Personas de bajos ingresos y votantes primerizos que quizás no tengan un pasaporte o un certificado de nacimiento de fácil acceso.
• Mujeres y personas transgénero cuyos nombres legales pueden no coincidir con los nombres que figuran en sus certificados de nacimiento. Casi 69 millones de mujeres en los EE. UU. podrían verse afectadas solo por la falta de coincidencia de nombres.
• Personas mayores, personas con discapacidades y votantes rurales que puedan carecer de acceso a transporte a las oficinas gubernamentales para presentar documentos en persona.
• Personas afectadas por la justicia y personas excarceladas que ya enfrentan barreras innecesarias para votar y reingresar a la vida cívica.

5. Conduciría a purgas electorales masivas e injustas

La Ley SAVE obligaría a los estados a realizar purgas frecuentes y agresivas del padrón electoral, eliminando a votantes registrados de las listas basándose en datos erróneos.

• Ya hemos visto las consecuencias dañinas de las purgas de votantes en estados como Georgia, Wisconsin y Ohio, donde decenas de miles de votantes elegibles, desproporcionadamente negros y de bajos ingresos, fueron eliminados injustamente.
• Estas purgas tienen graves defectos y a menudo apuntan a ciudadanos naturalizados y a aquellos con apellidos comunes.

La Ley SAVE es una solución en busca de un problema

• Estados Unidos ya cuenta con leyes estrictas para garantizar que sólo los ciudadanos voten, y los casos de votación de no ciudadanos son prácticamente inexistentes.
• Las sanciones por votar ilegalmente (deportación, multas y penas de prisión) son severas, por lo que es muy poco probable que los no ciudadanos se arriesguen a emitir un voto fraudulento.
• Este proyecto de ley no tiene como objetivo la seguridad electoral, sino la supresión del voto.

Tome medidas para detener la Ley SAVE

1. Llama a tus miembros del Congreso
   Debemos exigir que nuestros legisladores voten NO a la Ley SAVE y protejan el derecho fundamental al voto. Encuentre a su representante aquí y llame hoy: Find My Representative
2. Difundir la palabra
   Cuéntele a sus amigos, familiares y miembros de la comunidad sobre los peligros de la Ley SAVE. Comparta esta información en las redes sociales, envíe correos electrónicos a sus redes y aliente a otros a tomar medidas.
3. Involúcrate con VAAC
   Celebramos reuniones de coalición el primer y tercer viernes de cada mes: únase a nosotros para mantenerse informado y ser parte del movimiento para defender los derechos al voto.
   Regístrate aquí: Inscripción VAAC

Nuestra democracia funciona mejor cuando todos pueden participar. La Ley SAVE es un ataque directo a ese principio y no podemos permitirnos permanecer en silencio. Póngase de pie, hable y actúe hoy mismo.

Obra de arte cortesía de Matt Chase, Centro Brennan para la Justicia.